La segunda temporada de la serie original de Netflix llegó en un momento muy oportuno: Halloween, y para celebrar todo lo terrorífico y suspenso que tiene Stranger Things, nos inspiramos en los habitantes de Hawkins y las experiencias paranormales que sacuden al pueblo en plena década de los 80.
R U N: el abecedario pintado en la pared de la casa de Will acompañado de luces le permitían al niño comunicarse con su mamá desde el upside down. Puedes recrear esta tecnológica herramienta del más allá sin tener que pintar las paredes, recortando letras en cartulina negra y recortando luces con cartulina negra y de colores. Une cada letra con una ‘luz’ en la parte superior. Utiliza una perforadora para hacer un orificio en la parte superior de la ampolleta de papel y luego pasa una cinta negra creando una guirnalda. Puedes pegarla a la pared utilizando cinta adhesiva transparente. Preferentemente, ubícala sobre el sofá.
Perdido: Llena las paredes de la casa con carteles sobre Will y Barb perdidos. Puedes diseñarlos tú mismo en el computador e imprimir una copia o también hacerlos a mano y fotocopiarlos… al estilo 80s.
El upside down: Un poco de napa (relleno de cojín), algodón y luces bajas pueden darle a tu casa ese ambiente lúgubre y misterioso del mundo donde vive el Demogorgon. Para los más atrevidos, un poco de jalea sin sabor puede darle esa consistencia gelatinosa que cubre las superficies en la dimensión paralela.
Ambientación: quizás los más nostálgicos aún tengan en la bodega algún teléfono de dial redondo, un walkie talkie o incluso una vieja consola Atari, un VHS, walkman y cassettes. Deja esos elementos sobre la mesa y deja que la antigua tecnología te lleve de regreso a una época más simple…
y de paso, enseña a tus hijos aquellas cosas que te brindaron una infancia y adolescencia offline.